Andrea y Fernando caminaban de la mano hasta llegar al vestíbulo, donde tomaron caminos diferentes para sus respectivas clases. Los dos llegaron tarde, y por supuesto, les pusieron retraso, a una la de Inglés, y a otro el de Música. Andrea entró rápidamente, pidió disculpas y se sentó al lado de Clara. Vio que Mark estaba detrás con Silvia, los fulminó con la mirada y se giró orgullosa. La pelirroja se percató de ello y agarrando la mano a Andrea le dijo:
- Lo siento An, no te preocupes. Olvídate, se ve que todos los chicos son unos imbéciles.
- Clara, he vuelto con Fer.
Un grito ahogado se escuchó en la clase.
- Clara, ¿pasa algo?- La profesora alarmada, había ido corriendo hasta la mesa de las chicas.
- No, lo siento Loli. Esque me ha parecido ver una araña, y me dan mucho miedo.
- Ah, vale. Pues tranquila, no hay ninguna araña.
Loli volvió a retomar su explicación sobre algunos verbos irregulares para hacer oraciones, y mientras Clara miró a Andrea asustada.
- An, ¿estás segura?
- Si, por eso he llegado tarde. Me ha pedido perdón, me ha dicho que Elena le engatusó, pero que él me quiere. Clara, le conozco bien, se notaba en sus ojos el arrepentimiento. Y además, yo le quiero muchísimo.
- Quizá sea lo mejor. Me alegro por ti. Mark desde luego es un sinvergüenza.
- Por favor, no me hables de ese idiota. No quiero saber nada sobre él. Ya bastante le tendré que aguantar en mi casa.
Dejaron de hablar y a los veinte minutos la clase terminó. Quedaba una clase más y todos se irían a su casa. Silvia intentó hablar con Andrea en muchas ocasiones, pero no lo consiguió. Ésta hacía como si nada. Mark también intentó acercarse a la joven rubia, pero no había solución. Sabía que la había hecho pasar un mal rato. Los de 4º A, se dirigieron a la clase de Biología. Allí Andrea se sentaba al lado de Silvia, pero como no quería ni verla se cambió de mesa y se puso con Lucía, ya que su compañero, Manuel, había faltado. Le contó también lo de Fernando, a lo que esta se mostró muy indignada, pero dejó que su amiga hiciera lo que el corazón le dijera. Esa tarde Lucía iba a su casa a hacer un trabajo de Historia, por lo que comerían juntas también.
Biología se terminó y todos salieron agolpados, deseando dejar el instituto hasta el día siguiente. Cuando Clara, Lucía y Andrea bajaron, Fernando estaba esperando a la última. Vivían lejos, por tanto, tenían distintos caminos. Unos minutos más tarde bajaron Silvia y Mark, mirándose de reojo. Fer, cogió a Andrea de la mano y le regaló un bonito beso en los labios. La pareja que bajaba se miró muy extrañada y sobresaltada, pues no se esperaban nada así. La chica rubia sonrió, le dio un beso en la mejilla y cada uno se fue por un sitio. Las cuatro chicas y Mark caminaban separados en dos grupos, sin mucha conversación y con miradas que lo decían todo. Llegaron a casa de Andrea y como siempre ella se despidió de Clara con un fuerte abrazo y a Silvia ni la miró. Las dos rubias entraron, dejando detrás al polaco que no tenía buena cara. Andrea gritó que había llegado a casa y subió con Lucía a dejar las cosas. Cuando subían, a Andrea se le calló el móvil y Mark lo recogió con cuidado. Vio que tenía un mensaje de Fernando, pero no lo quiso mirar. Se lo subió y al dárselo sus manos se rozaron, se miraron silenciosos, y a la chica se le calló una cristalina lágrima que calló en la mano de él.
Biología se terminó y todos salieron agolpados, deseando dejar el instituto hasta el día siguiente. Cuando Clara, Lucía y Andrea bajaron, Fernando estaba esperando a la última. Vivían lejos, por tanto, tenían distintos caminos. Unos minutos más tarde bajaron Silvia y Mark, mirándose de reojo. Fer, cogió a Andrea de la mano y le regaló un bonito beso en los labios. La pareja que bajaba se miró muy extrañada y sobresaltada, pues no se esperaban nada así. La chica rubia sonrió, le dio un beso en la mejilla y cada uno se fue por un sitio. Las cuatro chicas y Mark caminaban separados en dos grupos, sin mucha conversación y con miradas que lo decían todo. Llegaron a casa de Andrea y como siempre ella se despidió de Clara con un fuerte abrazo y a Silvia ni la miró. Las dos rubias entraron, dejando detrás al polaco que no tenía buena cara. Andrea gritó que había llegado a casa y subió con Lucía a dejar las cosas. Cuando subían, a Andrea se le calló el móvil y Mark lo recogió con cuidado. Vio que tenía un mensaje de Fernando, pero no lo quiso mirar. Se lo subió y al dárselo sus manos se rozaron, se miraron silenciosos, y a la chica se le calló una cristalina lágrima que calló en la mano de él.
Me encanta como escribes, eres perfecta sabes hacer de todo jajaja.
ResponderEliminarEsto no a sido muy inesperado sabia que iba a pasar esto :)
Besitoooos
Sigue por favore!!
ResponderEliminarJiji, el proximo viernes habra continuacion :)
EliminarHola!! Como estas??
ResponderEliminarRecien he leido todos los capitulos y me han gustado mucho!
Escribis muy lindo!! Espero que lo continues pronto!
Saludos :)
Pau.
Hola! Veo que eres nueva por aquí. Bienvenida!!!
EliminarMe alegro muchísimo de que te hayan gustado y espero que la continuación te guste aún más!
Un abrazo! :)